Ingredientes:
- 200 gramos de huevas de merluza.
- 1 tomate.
- 1 pimiento verde.
- 1/2 cebolla.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Vinagre.
- Sal-
Elaboración:
Cogemos las huevas y las salamos. En un papel film las envolvemos, cerrando bien por los laterales y las ponemos en agua a hervir, dejandolas unos 10-12 minutos.
Una vez que haya pasado el tiempo, las sacamos del agua y dejamos enfriar, mientras, pelamos el tomate y lo picamos, y también el pimiento y la cebolla, poniendolo en una fuente.
Una vez frías, sacamos del papel film, y partimos en rodajas, las ponemos en la fuente con las verduras y aliñamos con sal, vinagre y aceite.
Notas:
Empecemos por las huevas, yo, el plato lo hago con huevas de merluza, pero seguro que con otras, también quedará estupendo.
Lo del papel film es para que no se deformen mucho, es muy sencillo, las envolvéis y dáis vueltas sobre ellas mismas, como si estuvierais envolviendo un caramelo. Este paso no es imprescindible, pero sí ayuda a que no se rompa la membrana que las recubre, aunque hay un pequeño truquito si no usáis el papel film y es echar un chorrito de vinagre en el agua y ponerlas a cocer partiendo del agua fría.
Una cosa buena, se pueden congelar una vez cocidas, así solo las tendréis que sacar el día que os apetezca preparar el aliño, aunque con mahonesa están muy buenas también.
El tomate, os recomiendo que además de pelarlo, le quitéis las semillas, así el aliño quedará menos aguado.
Apuntes:
De nuevo el vinagre entra en juego en un plato y por eso dejaremos los vinitos para otras recetas a las que les vaya mejor. ¿Qué bebida gana?, sin dudarlo ni un segundo, la cerveza, y más, con el calorcito del que disfrutamos estos días, al menos por Sevilla, que es donde estoy preparando esta entrada, y lo de calorcito es una forma de hablar, porque mirad, ni un vivo se ve por el puente...
El veranillo de "San Miguel" ha hecho que desee con ganas que llegue el frío, bueno, tampoco me pondré tremendista, pero sí que ha hecho que me tome esas cervecitas casi heladas con unas ganas locas.
Este viaje no he conocido ningún sitio nuevo, pero sí que he ido a uno de los sitios más conocidos de Triana, se llama Casa Ruperto, ¿su especialidad?, las codornices, buenísimas, si un día pasáis por Sevilla y os apetece conocerlo está en la calle Santa Cecilia, muy cerquita de la calle San Jacinto, si váis, ya me decís lo que os parece, y para muestra...
Claro que tienen más cosas para comer, pero yo voy a comer esos ricos pajaritos, ahhh, por cierto, los camareros muy simpáticos, al menos conmigo.
No os hago perder más tiempo, y no olvidéis nuestra cita del domingo que viene, aunque esta vez ha sido el lunes... Es lo que tiene la familia...
Feliz semana a todos!!!
lunes, 3 de octubre de 2011
domingo, 25 de septiembre de 2011
Flores
- 3 huevos.
- 6 cucharadas de agua.
- 6 cucharadas de harina.
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
- Miel.
- Aceite de oliva virgen extra para freír.
Elaboración:
En un bol ponemos los huevos y batimos, añadimos la harina, el agua y el aceite y mezclamos todo muy bien, dejando reposar la mezcla una media hora.
En una sartén con profundidad, ponemos el aceite a calentar, metiendo el molde dentro, para que vaya cogiendo temperatura. Cuando el aceite esté bien caliente, metemos el molde en la masa hasta sus 2/3 partes, sacamos y lo metemos en el aceite para freír, levantando con cuidado el molde para que se suelte y no se rompa, dejandolo dentro del aceite para que coja temperatura de nuevo. Dejamos la flor para que se dore y le damos la vuelta, dejandola unos segundos por el otro lado, para que se hagan los bordes, la sacamos con una espumadera y la dejamos escurrir boca abajo sobre papeles absorventes. Repetiremos la operación mientras que quede masa...
En un cazo pondremos la miel a calentar y cuando suba una vez, la apartaremos del fuego, pasando las flores de una en una por ella, cogiendolas por la base y metiendo el borde. Y así de nuevo de una en una, poniendolas en una fuente.
Notas:
Empecemos con la masa, si al meter el molde en la sartén una vez que tenga la masa pegada se deshace la flor, será que le falta un poco de harina, con lo que tendréis que añadir un poquito más, y si por el contrario se queda pegada al molde, será que le falta un poquito de agua.
Os dejo unas fotos para que veáis en un simple golpe de vista los pasos para hacer las flores...
Y los pasos de la miel, que no tiene mucho misterio, pero como tengo las fotos las pongo, jejeje...
Con la miel hay que tener cuidado, porque si sube más de una vez quedará muy "pegajosa", y cuidadito con quemarse...
El aceite deberá estar bien caliente, para que la flor se suelte cuanto antes, pero cuidado, al ser tan fina se quema con mucha facilidad. Yo, en mi cocina, que es una vitrocerámica, lo tengo en el número 7, pero depende de la potencia de los fuegos que tengáis en casa.
Lo mejor para dar la vuelta a las flores y para sacarlas del aceite, es una "araña", bueno, espumadera, para los neófitos (nuevos, jejeje...) en esto de la cocina, pero de alambre, lo que hará que escurran mejor el aceite.
Apuntes:
Muchos son los que me han preguntado como es el molde de las flores, y para que no haya dudas, os pongo la foto, espero que lo aprecieis bien.
El molde lo podréis encontrar en ferreterías, no en todas, pero sí en algunas, y una vez que terminéis de hacer las flores, lo guardáis recién sacado de la sartén, envuelto en un papel, para que no se oxide.
Diossss, parece mentira que una receta tan secilla de hacer cueste tanto explicarla, pero claro, es lo que tienen esas recetas que llevas haciendo y viendo hacer toda la vida, que como el Catón, las haces de "carrerilla", en fin, espero que no tengáis muchas dudas, pero como ayuda, en el Facebook pondré el "casi" paso a paso, como ya he hecho con alguna que otra receta, y si aun así seguís teniendo dudas, estaré dispuesta a solucionarlas, o al menos a intentarlo...
Ese es el papel que siempre tengo en el cajón de la cocina, la receta resumida, bueno, super reducida, pero con eso sobra si un día falla la memoria, es sencillo, no? Por cierto, con esa cantidad salen un par de docenas, es la cantidad justa para disfrutarlas y no cansarse de comerlas.
No sé la cantidad de flores que habré hecho a lo largo de mi vida, pero han sido muchas... Hace años, era temible cada vez que mi abuela llamaba a casa y decía... "dile a las niñas que bajen, que voy a hacer unos dulces y quiero que me ayuden". Eso significaba estar toda la mañana al lado de la lumbre, porque claro, ella no lo hacia en la cocina, lo hacía en la "cocinilla", en una sartén gigante. Era raro el día que no discutía con ella, porque se empeñaba en hacer dulces para toda la familia, cosa que me cabreaba enormemente, mi frase era siempre la misma... "si los titos quieren dulces, que se los hagan ellos!!!", y ella siempre amenazaba con no volver a hacer ni un dulce más, amenaza que jamás cumplió...
Con el paso del tiempo lo veo de otra forma, eso me dio la oportunidad de pasar con ella ratos interminables, charlando, disfrutando de ella y de sus historias... Ahora desearía poder hacerlo de nuevo...
En fin, espero que os guste la recetilla de esta semana, es una de mis favoritas en cuestión de dulces típicos, en mi casa se hacen en cualquier época del año, aunque sé que en otros sitios son un dulce típico de la época de Carnaval, pero es que están tan buenas que no podría comerlas una vez al año...
Nos vemos sin falta el domingo que viene... Feliz semana a todos!!!
lunes, 19 de septiembre de 2011
Perdices en escabeche
Ingredientes:
- 4 perdices.
- 3/4 partes de aceite de oliva virgen extra.
- 1/4 parte de vinagre de vino blanco.
- 1 chorrito de vino blanco.
- 1 cebolla grande.
- 1 cabeza de ajos.
- 2 hojas de laurel.
- Pimienta en grano.
- Sal.
- Pimienta molida.
- Aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
Para empezar, bridamos las perdices para que no pierdan la forma durante la cocción y las salpimentamos. En una olla ponemos un chorrito de aceite y sofreímos las perdices, con cuidado de que no se quemen.
La cebolla la picamos en juliana y la añadimos a la olla, dejándola un ratito para que poche, y añadimos el vino blanco, dejando que evapore y que impregne las perdices y la cebolla.
Cuando ha reducido un poco, añadimos 3 partes de aceite por 1 de vinagre, la cabeza de ajos partida al medio, unos granos de pimienta y las dos hojas de laurel.
Cuando empiece a cocer, bajaremos el fuego al mínimo y tapamos la olla, pero no del todo, dejando que cueza entre una hora y media a dos horas.
Notas:
El tiempo de cocción dependerá de si son perdices de campo o perdices de criadero, estas últimas serán más tiernas y necesitarán menos tiempo de cocción.
El bridado ( atado del pájaro ), siempre lo empiezo atando las patas entre ellas, y después voy subiendo... Haced pruebas en casa y veréis la que os resulta más cómoda.
Esta receta también queda muy buena con codornices, hasta con las compradas de granja!!!, es una solución si no tenéis cazadores en casa o amigos a los que engañar para que os regalen las preciadas patirrojas.
Apuntes:
Por segunda semana consecutiva no voy a hablar del vino para este plato, ¿el motivo?, sencillísimo, bebí agua mientras que comía, la verdad es que no me gusta beber vino con ciertos platos y los escabeches son de esos.
Un pequeño detalle, que tal vez a muchos os parezca una tontería, pero que es importante, si cocináis un plato de caza matado con plomo, cuidadito a la hora de masticar, no sería la primera vez que se "estropea" una comida por un mordisco mal dado...
Pues sí, esa soy yo, la de la coleta, y justo el que está delante de mí, mi padre, esa persona que me ha enseñado lo importante que es compartir cada momento con las personas a las que más quieres...
Entiendo que a muchos de vosotros no os guste la caza, entiendo que no comprendáis el "rollo" de matar a un animalito, pero cuando lo has mamado desde que eras una niña, cuando tus familiares te han enseñado a amar y respetar la caza y el campo, pues lo ves de otra manera... En mi casa, cuando llegaba más tarde de la cuenta, no me castigaban con no salir el sábado siguiente, me castigaban no dejandome ir a la siguiente montería...
Mi recuerdo desde aquí a los "González", Manolo, Pedro y Mariano ( sé que falta uno, pero no le iba el rollo de la caza... Flores, el que yo digo que era el más normal de los González... ), el primero era mi abuelo y los otros sus hermanos, ellos me han hecho pasar algunos de los momentos más inolvidables de mi infancia y adolescencia... Ainsss, mejor me despido o me pondré tontorrona...
Feliz semana a todos y hasta el domingo que viene!!!
- 4 perdices.
- 3/4 partes de aceite de oliva virgen extra.
- 1/4 parte de vinagre de vino blanco.
- 1 chorrito de vino blanco.
- 1 cebolla grande.
- 1 cabeza de ajos.
- 2 hojas de laurel.
- Pimienta en grano.
- Sal.
- Pimienta molida.
- Aceite de oliva virgen extra.
Elaboración:
Para empezar, bridamos las perdices para que no pierdan la forma durante la cocción y las salpimentamos. En una olla ponemos un chorrito de aceite y sofreímos las perdices, con cuidado de que no se quemen.
La cebolla la picamos en juliana y la añadimos a la olla, dejándola un ratito para que poche, y añadimos el vino blanco, dejando que evapore y que impregne las perdices y la cebolla.
Cuando ha reducido un poco, añadimos 3 partes de aceite por 1 de vinagre, la cabeza de ajos partida al medio, unos granos de pimienta y las dos hojas de laurel.
Cuando empiece a cocer, bajaremos el fuego al mínimo y tapamos la olla, pero no del todo, dejando que cueza entre una hora y media a dos horas.
Notas:
El tiempo de cocción dependerá de si son perdices de campo o perdices de criadero, estas últimas serán más tiernas y necesitarán menos tiempo de cocción.
El bridado ( atado del pájaro ), siempre lo empiezo atando las patas entre ellas, y después voy subiendo... Haced pruebas en casa y veréis la que os resulta más cómoda.
Esta receta también queda muy buena con codornices, hasta con las compradas de granja!!!, es una solución si no tenéis cazadores en casa o amigos a los que engañar para que os regalen las preciadas patirrojas.
Apuntes:
Por segunda semana consecutiva no voy a hablar del vino para este plato, ¿el motivo?, sencillísimo, bebí agua mientras que comía, la verdad es que no me gusta beber vino con ciertos platos y los escabeches son de esos.
Un pequeño detalle, que tal vez a muchos os parezca una tontería, pero que es importante, si cocináis un plato de caza matado con plomo, cuidadito a la hora de masticar, no sería la primera vez que se "estropea" una comida por un mordisco mal dado...
Pues sí, esa soy yo, la de la coleta, y justo el que está delante de mí, mi padre, esa persona que me ha enseñado lo importante que es compartir cada momento con las personas a las que más quieres...
Entiendo que a muchos de vosotros no os guste la caza, entiendo que no comprendáis el "rollo" de matar a un animalito, pero cuando lo has mamado desde que eras una niña, cuando tus familiares te han enseñado a amar y respetar la caza y el campo, pues lo ves de otra manera... En mi casa, cuando llegaba más tarde de la cuenta, no me castigaban con no salir el sábado siguiente, me castigaban no dejandome ir a la siguiente montería...
Mi recuerdo desde aquí a los "González", Manolo, Pedro y Mariano ( sé que falta uno, pero no le iba el rollo de la caza... Flores, el que yo digo que era el más normal de los González... ), el primero era mi abuelo y los otros sus hermanos, ellos me han hecho pasar algunos de los momentos más inolvidables de mi infancia y adolescencia... Ainsss, mejor me despido o me pondré tontorrona...
Feliz semana a todos y hasta el domingo que viene!!!
domingo, 11 de septiembre de 2011
Gambas al ajillo
Ingredientes:
- 100 gr. de gambas peladas.
- 4 ajos.
- 1 guindilla cayena.
- Sal.
- Aceite.
Elaboración:
En una cazuela de barro ponemos el aceite y los ajos fileteados, lo ponemos al fuego junto con la guindilla, y cuando estén dorados, añadimos las gambas y salamos, moviendo para que se hagan por todos lados por igual, apartamos del fuego después de 4 ó 5 minutos y a comer.
Notas:
Si no tenéis una cazuela de barro, se puede hacer en una sartén ( os contaré un secreto, yo lo he hecho en una, a ver, tengo vitro y la cazuelita esa de la foto no es para eso, pero pensé que quedaría más vistoso )
Cuidado con dos cosas, una, que no se quemen los ajos, porque pasan de estar doraros a directamente achicharrados... Y otra, muchísimo cuidado con las guindillas, en los ingredientes puse una, porque no sé lo que picarán las que tenéis en casa, yo le puse 3, pero es que a mi el picante me flipa...
Apuntes:
Una semana más, una receta menos... Una semana menos, una receta más... Como podréis comprobar, la receta de esta semana no tiene mucha complicación, pero tenía ganas de ponerla.
Una variante de esta receta son las gambas al pil pil, que además de los ajos y de la guindilla, lleva pimentón ( ni que decir tiene que si es de La Vera, mucho mejor... ), y perejil picado, que se hará igual, pero añadiendo al final una cucharadita de pimentón, y al sacarlo del fuego, el perejil picado. Lo mejor de esta receta es la salsa, eso sí, siempre que haya un buen pan para mojar en ella.
Y con qué acompaño yo tanto las gambas al ajillo, como las gambas al pil pil? Con una fresquita...
... Era evidente, con una cerveza bien fría, la marca la elegís vosotros, aunque una cosa sí que os digo, que no sea una cerveza con mucho cuerpo, aunque eso, es un gusto personal...
Y por hoy lo dejo, no sin antes recordar que nos veremos el domingo que viene de nuevo, toca poner algo de carne, y aprovechando que la temporada de caza está muy cerca, prepararé algo para ir dando alguna idea.
Feliz semana a todos y hasta dentro de siete días!!!
- 100 gr. de gambas peladas.
- 4 ajos.
- 1 guindilla cayena.
- Sal.
- Aceite.
Elaboración:
En una cazuela de barro ponemos el aceite y los ajos fileteados, lo ponemos al fuego junto con la guindilla, y cuando estén dorados, añadimos las gambas y salamos, moviendo para que se hagan por todos lados por igual, apartamos del fuego después de 4 ó 5 minutos y a comer.
Notas:
Si no tenéis una cazuela de barro, se puede hacer en una sartén ( os contaré un secreto, yo lo he hecho en una, a ver, tengo vitro y la cazuelita esa de la foto no es para eso, pero pensé que quedaría más vistoso )
Cuidado con dos cosas, una, que no se quemen los ajos, porque pasan de estar doraros a directamente achicharrados... Y otra, muchísimo cuidado con las guindillas, en los ingredientes puse una, porque no sé lo que picarán las que tenéis en casa, yo le puse 3, pero es que a mi el picante me flipa...
Apuntes:
Una semana más, una receta menos... Una semana menos, una receta más... Como podréis comprobar, la receta de esta semana no tiene mucha complicación, pero tenía ganas de ponerla.
Una variante de esta receta son las gambas al pil pil, que además de los ajos y de la guindilla, lleva pimentón ( ni que decir tiene que si es de La Vera, mucho mejor... ), y perejil picado, que se hará igual, pero añadiendo al final una cucharadita de pimentón, y al sacarlo del fuego, el perejil picado. Lo mejor de esta receta es la salsa, eso sí, siempre que haya un buen pan para mojar en ella.
Y con qué acompaño yo tanto las gambas al ajillo, como las gambas al pil pil? Con una fresquita...
... Era evidente, con una cerveza bien fría, la marca la elegís vosotros, aunque una cosa sí que os digo, que no sea una cerveza con mucho cuerpo, aunque eso, es un gusto personal...
Y por hoy lo dejo, no sin antes recordar que nos veremos el domingo que viene de nuevo, toca poner algo de carne, y aprovechando que la temporada de caza está muy cerca, prepararé algo para ir dando alguna idea.
Feliz semana a todos y hasta dentro de siete días!!!
domingo, 4 de septiembre de 2011
Rollitos de California
Ingredientes:
- 200 gr. de arroz para sushi.
- 200 cl. de agua.
- 2 cucharadas de vinagre preparado para sushi.
- 2 láminas de alga nori.
- 1 aguacate partido en tiras.
- 1 pepino pelado y sin semillas en tiras finas.
- 6-8 palitos de cangrejo partidos en dos, o en cuatro.
- Semillas de sésamo.
- Pasta de wasabi.
- Salsa de soja.
- Jengibre encurtido.
Elaboración:
Para empezar, debéis lavar muy bien el arroz, hasta que el agua salga totalmente clara y lo escurrís. Lo ponéis en un cazo junto con el agua y a fuego fuerte lo lleváis a ebullición, cuando empiece a cocer, bajáis el fuego al mínimo, tapáis y dejáis 20 minutos, retirandolo del fuego (no destapéis el cazo en ese tiempo!!! ).
Una vez cocido, echáis el arroz en un cuenco y le añadís las dos cucharadas del vinagre para sushi, moviendo con una cuchara para que se mezcle todo muy bien, abanicando mientras para que enfríe cuanto antes. El arroz deberá estar a temperatura ambiente al utilizarlo.
Bien, teniendo esto preparado, vamos a intententar hacer los rollitos perfectos... Para empezar, explicar como se hacen los que tienen la lámina de alga por fuera... Ponemos una lámina de alga, con la parte brillante hacia abajo en la esterilla para hacer sushi, y con las manos humedecidas en agua, ya que el arroz es muy "pegajoso", extenderemos la mitad del arroz, dejando un poco sin cubrir, con 2 cm. bastará, por la parte más alejada a nosotros. Y en sentido horizontal, ponéis una o dos tiras de aguacate, una o dos de palitos de cangrejo y una de pepino, que vayan de extremo a extremo. Con ayuda de la esterilla, empezaremos a enrollar, levantando la esterilla según vamos avanzando y presionando mientras. Debéis humedecer con un poco de agua el extremo del alga, para que selle bien. Y hecho todo esto, lo cortaremos con un cuchillo humedecido en agua ( no diré que tiene que estar muy bien afilado...).
Y ahora, toca hacer esos rollitos, pero "invertidos"... Misma operación, lámina de alga sobre la esterilla, con el lado brillante hacia abajo, y encima, de nuevo con las manos humedecidas, ponemos la otra mitad el arroz, sin dejar huecos. Encima, pondremos una capa de papel film transparente ( para evitar que se pegue ) y le damos la vuelta, de manera que quede el arroz del lado de la esterilla, y hacemos la misma operación, ponemos las tiras de aguacate, de palitos de cangrejo y de pepino, empezando a enrollar por el lado de los ingredientes, retirando con cuidado el papel film mientras que vamos enrollando. En un plato, ponéis las semillas de sésamo tostado y pasáis por ellas el rollito y con el mismo cuchillo afilado de antes, y nuevamente humedecido, lo cortáis en porciones.
Para acompañar, ponéis en un bol, salsa de soja, en otro, pasta de wasabi y lo acompañáis de jengibre encurtido.
Notas:
Si no encontráis el vinagre preparado para sushi, podéis utilizar dos cucharadas de vinagre de arroz, mezclado con una cucharada de azúcar y media de sal.
La esterilla tampoco es que sea necesaria, lo único que hace es facilitar la "creación" del rollito, pero si no tenéis, con papel film se puede solucionar, aunque deberéis tener más cuidado.
Otra cosita, la pasta de wasabi, la podéis poner en el interior, junto con los otros ingredientes, con moderación, porque pica bastante, aunque es un picor que desaparece rápido. Yo no lo hice, porque a mí, me gusta mezclarla con la salsa de soja, así queda buenísima...
Apuntes:
Una cosa tengo clara, casi nunca suelo hacer caso a las recomendaciones de los vinos, que si uno blanco para el pescado, que si uno tinto para la carne, que si el comodín del rosado, ... Pero esta vez lo he hecho...
... En mi última visita a la tienda de licores donde suelo comprar mi querido Lagavulin 16, mi amada Hendrick's y alguna otra cosita más, encontré este vino de tierras malagueñas, un botani 2010, elaborado con uva moscatel, de la zona de la Axarquía malagueña.
Es, para empezar, un vino muy brillante y limpio, glicérico, es decir, que al mover la copa crea un fantástico lagrimeo cuando vuelve a su ser...
Tiene un color amarillo pajizo fantástico, con un toque verdoso, los aromas, bufff, a ver, me recuerda un poco a los lichis, no sé si alguna vez los habréis probado, son una fruta "diferente", con un toque dulzón muy característico, por supuesto que canta que está elaborado con uva Moscatel, me he comido muchas y ese "sabor" lo tengo en la memoria olfativa ( un día os explicaré el tema del retronasal... A los que no sepáis lo que es, claro )
En boca es un poco dulzón, tal vez algo licoroso, pero fantástico... Sabéis, es cierto que al plato que he preparado hoy le va fenomenal, son sabores que casan muy bien, en definitiva, me encanta que en la propia botella lo recomienden para acompañar al sushi, un acierto de pleno.
Pues si, chicos, ese vino es el que me ha animado a preparar esta comida, ahhh, una cosita, cuidadín con el wasabi, no es que pique mucho, nada comparable con un pimiento de Padrón asesino ( aun se me caen las lágrimas al recordar uno que estuvo a punto de terminar conmigo...), pero tiene un picor de esos que se meten en el fondo de la nariz..., aunque tomado en su justa medida es muy agradable.
Una cosita, seguro que habéis observado que en el plato hay más cosas, claro, es que la foto quedaba un poco tristona solo con los dos rollitos, además, era mi comida, por lo que tenía que hacer algo más si no quería morir de hambre..., por eso hice tres barritas de arroz, una con atún, otra con salmón y otra con un langostino, buenísimos también...
Y estamos ya en septiembre, el verano toca a su fin, y os diré algo que seguro que muchos sabéis ya, y es que no he conseguido pasar de un ligero tono de leche de soja en mi piel... Es lo malo de vivir en la playa, que como está ahí, pues lo vas dejando para otro día, y así pasan las semanas y llega septiembre y te das cuenta que llevas más de un mes sin pisar la playa... Seguro que el día que viva alejada de ella, estaré deseando ir... En fin, esto de la playa es para muchos como el gimnasio para otros, que te haces el propósito de ir "después de..." y al final, nada de nada.
Y nada más por hoy, como siempre, espero que os guste la recetilla y ya sabéis, si hay cualquier duda, preguntad, que gustosa os intentaré ayudar...
Feliz semana a todos y hasta el domingo que viene a más tardar!!!
- 200 gr. de arroz para sushi.
- 200 cl. de agua.
- 2 cucharadas de vinagre preparado para sushi.
- 2 láminas de alga nori.
- 1 aguacate partido en tiras.
- 1 pepino pelado y sin semillas en tiras finas.
- 6-8 palitos de cangrejo partidos en dos, o en cuatro.
- Semillas de sésamo.
- Pasta de wasabi.
- Salsa de soja.
- Jengibre encurtido.
Elaboración:
Para empezar, debéis lavar muy bien el arroz, hasta que el agua salga totalmente clara y lo escurrís. Lo ponéis en un cazo junto con el agua y a fuego fuerte lo lleváis a ebullición, cuando empiece a cocer, bajáis el fuego al mínimo, tapáis y dejáis 20 minutos, retirandolo del fuego (no destapéis el cazo en ese tiempo!!! ).
Una vez cocido, echáis el arroz en un cuenco y le añadís las dos cucharadas del vinagre para sushi, moviendo con una cuchara para que se mezcle todo muy bien, abanicando mientras para que enfríe cuanto antes. El arroz deberá estar a temperatura ambiente al utilizarlo.
Bien, teniendo esto preparado, vamos a intententar hacer los rollitos perfectos... Para empezar, explicar como se hacen los que tienen la lámina de alga por fuera... Ponemos una lámina de alga, con la parte brillante hacia abajo en la esterilla para hacer sushi, y con las manos humedecidas en agua, ya que el arroz es muy "pegajoso", extenderemos la mitad del arroz, dejando un poco sin cubrir, con 2 cm. bastará, por la parte más alejada a nosotros. Y en sentido horizontal, ponéis una o dos tiras de aguacate, una o dos de palitos de cangrejo y una de pepino, que vayan de extremo a extremo. Con ayuda de la esterilla, empezaremos a enrollar, levantando la esterilla según vamos avanzando y presionando mientras. Debéis humedecer con un poco de agua el extremo del alga, para que selle bien. Y hecho todo esto, lo cortaremos con un cuchillo humedecido en agua ( no diré que tiene que estar muy bien afilado...).
Y ahora, toca hacer esos rollitos, pero "invertidos"... Misma operación, lámina de alga sobre la esterilla, con el lado brillante hacia abajo, y encima, de nuevo con las manos humedecidas, ponemos la otra mitad el arroz, sin dejar huecos. Encima, pondremos una capa de papel film transparente ( para evitar que se pegue ) y le damos la vuelta, de manera que quede el arroz del lado de la esterilla, y hacemos la misma operación, ponemos las tiras de aguacate, de palitos de cangrejo y de pepino, empezando a enrollar por el lado de los ingredientes, retirando con cuidado el papel film mientras que vamos enrollando. En un plato, ponéis las semillas de sésamo tostado y pasáis por ellas el rollito y con el mismo cuchillo afilado de antes, y nuevamente humedecido, lo cortáis en porciones.
Para acompañar, ponéis en un bol, salsa de soja, en otro, pasta de wasabi y lo acompañáis de jengibre encurtido.
Notas:
Si no encontráis el vinagre preparado para sushi, podéis utilizar dos cucharadas de vinagre de arroz, mezclado con una cucharada de azúcar y media de sal.
La esterilla tampoco es que sea necesaria, lo único que hace es facilitar la "creación" del rollito, pero si no tenéis, con papel film se puede solucionar, aunque deberéis tener más cuidado.
Otra cosita, la pasta de wasabi, la podéis poner en el interior, junto con los otros ingredientes, con moderación, porque pica bastante, aunque es un picor que desaparece rápido. Yo no lo hice, porque a mí, me gusta mezclarla con la salsa de soja, así queda buenísima...
Apuntes:
Una cosa tengo clara, casi nunca suelo hacer caso a las recomendaciones de los vinos, que si uno blanco para el pescado, que si uno tinto para la carne, que si el comodín del rosado, ... Pero esta vez lo he hecho...
... En mi última visita a la tienda de licores donde suelo comprar mi querido Lagavulin 16, mi amada Hendrick's y alguna otra cosita más, encontré este vino de tierras malagueñas, un botani 2010, elaborado con uva moscatel, de la zona de la Axarquía malagueña.
Es, para empezar, un vino muy brillante y limpio, glicérico, es decir, que al mover la copa crea un fantástico lagrimeo cuando vuelve a su ser...
Tiene un color amarillo pajizo fantástico, con un toque verdoso, los aromas, bufff, a ver, me recuerda un poco a los lichis, no sé si alguna vez los habréis probado, son una fruta "diferente", con un toque dulzón muy característico, por supuesto que canta que está elaborado con uva Moscatel, me he comido muchas y ese "sabor" lo tengo en la memoria olfativa ( un día os explicaré el tema del retronasal... A los que no sepáis lo que es, claro )
En boca es un poco dulzón, tal vez algo licoroso, pero fantástico... Sabéis, es cierto que al plato que he preparado hoy le va fenomenal, son sabores que casan muy bien, en definitiva, me encanta que en la propia botella lo recomienden para acompañar al sushi, un acierto de pleno.
Pues si, chicos, ese vino es el que me ha animado a preparar esta comida, ahhh, una cosita, cuidadín con el wasabi, no es que pique mucho, nada comparable con un pimiento de Padrón asesino ( aun se me caen las lágrimas al recordar uno que estuvo a punto de terminar conmigo...), pero tiene un picor de esos que se meten en el fondo de la nariz..., aunque tomado en su justa medida es muy agradable.
Una cosita, seguro que habéis observado que en el plato hay más cosas, claro, es que la foto quedaba un poco tristona solo con los dos rollitos, además, era mi comida, por lo que tenía que hacer algo más si no quería morir de hambre..., por eso hice tres barritas de arroz, una con atún, otra con salmón y otra con un langostino, buenísimos también...
Y estamos ya en septiembre, el verano toca a su fin, y os diré algo que seguro que muchos sabéis ya, y es que no he conseguido pasar de un ligero tono de leche de soja en mi piel... Es lo malo de vivir en la playa, que como está ahí, pues lo vas dejando para otro día, y así pasan las semanas y llega septiembre y te das cuenta que llevas más de un mes sin pisar la playa... Seguro que el día que viva alejada de ella, estaré deseando ir... En fin, esto de la playa es para muchos como el gimnasio para otros, que te haces el propósito de ir "después de..." y al final, nada de nada.
Y nada más por hoy, como siempre, espero que os guste la recetilla y ya sabéis, si hay cualquier duda, preguntad, que gustosa os intentaré ayudar...
Feliz semana a todos y hasta el domingo que viene a más tardar!!!
jueves, 1 de septiembre de 2011
Bacardi cóctel.
Ingredientes:
- 4.5 cl. de ron Bacardi.
- 2 cl. de zumo de limón.
- 0.5 cl de granadina.
Elaboración:
En una coctelera ponemos los tres ingredientes, añadimos unos cubitos de hielo, tapamos la coctelera y agitamos muy bien, para que los 3 ingredientes se unan.
Servimos en una copa de cóctel.
Buenísimo y refrescante cóctel, que aun apetece en estas fechas, la granadina le da un toque característico, pero si no tenéis en casa, podéis utilizar como sustituto una cucharada de azúcar, aunque ni el sabor, ni el color, y por supuesto el colorido serán el mismo.´
Y nada más por hoy, nos vemos para no perder la costumbre el domingo, o como muy tarde el lunes... Tranquilos, que ya está el finde en puertas!!! Anda, qué mejor momento para disfrutar de este cóctel...?
- 4.5 cl. de ron Bacardi.
- 2 cl. de zumo de limón.
- 0.5 cl de granadina.
Elaboración:
En una coctelera ponemos los tres ingredientes, añadimos unos cubitos de hielo, tapamos la coctelera y agitamos muy bien, para que los 3 ingredientes se unan.
Servimos en una copa de cóctel.
Buenísimo y refrescante cóctel, que aun apetece en estas fechas, la granadina le da un toque característico, pero si no tenéis en casa, podéis utilizar como sustituto una cucharada de azúcar, aunque ni el sabor, ni el color, y por supuesto el colorido serán el mismo.´
Y nada más por hoy, nos vemos para no perder la costumbre el domingo, o como muy tarde el lunes... Tranquilos, que ya está el finde en puertas!!! Anda, qué mejor momento para disfrutar de este cóctel...?
domingo, 28 de agosto de 2011
Tiramisú
Ingredientes:
- 3 yemas.
- 75 gr. de azúcar.
- 75 ml. de vino Marsala.
- 100 ml. de vino Marsala para remojar los bizcochos.
- 75 ml. de café.
- 250 gr. de queso mascarpone.
- 125 ml. de nata.
- 1 clara.
- 150 gr. de bizcochos.
- Cacao para adornar.
Elaboración:
En un bol al baño María, ponéis las yemas de huevo y el azúcar, batiendolo con unas barillas hasta que la crema quede de un tono más o menos marfil. Echáis el vino Marsala y a mezclar con suavidad hasta que la mezcla espese, y se deja enfriar.
El mascarpone lo mezcláis con el café.
Batís la nata hasta que esté bien montada.
Batís la clara hasta que esté a punto de nieve, y la mezcláis con mucho cuidado con la mezcla de las yemas y azúcar.
En un plato hondo, ponéis el resto del vino Marsala, y váis empapando los bizcochos, colocandolos en un molde. Ponéis encima la mezcla de mascarpone, después, la crema de yemas y azúcar y para terminar, la nata montada.
Y directo al frigorífico, para que coja cuerpo durante unas horas. A la hora de servirlo, espolvoreáis el cacao en polvo y ya tenéis un riquísimo tiramisú.
Notas:
Recomiendo que el queso esté a temperatura ambiente, el motivo?, muy simple, será mucho más fácil mezclarlo con el café, y quedará más cremoso.
Otro punto, el vino Marsala que se utiliza para la mezcla con las yemas y el azúcar se puede cambiar por brandy, y le dará un toque diferente.
Más cositas... sí, el bizcocho tenéis dos opciones, o hacerlo en casa, o comprarlo, eso depende de las ganas o el tiempo que tengáis para estar en la cocina, yo, en este caso los he comprado, tenía tiempo, vale, pero no había ganas, básicamente porque me apetecía dedicar ese tiempo a otras cosas...
Y si por cualquier cosa, no encontráis el vino Marsala, podéis cambiar todo por brandy, eso si, a la hora de remojar los bizcochos, no olvidéis mezclarlo con café, y por supuesto que esté frio, porque si no, los bizcochos se quedarán demasido blandos y será muy complicado manejarlos.
Apuntes:
Esta vez no comentaré ninguna bebida con la que acompañar este riquísimo tiramisú, por un par de razones, una, que hasta que no remate las dos ginebras ( es lo que apetece después de comer demasiado tiramisú ) que tengo en casa, no pienso comprar ninguna nueva, aunque sí os puedo recordar que la que nunca falta en mi armario de las bebidas es la riquísima Hendrick's, lo recuerdo porque en poco más de un mes es mi santo, sí, el día del Pilar, y si no sabéis que regalarme, os aseguro que con eso no váis a fallar..., la otra?, pues no me regañéis, pero es que la lasaña que voy a cenar hoy está casi en su punto, y aun tengo que poner la mesa...
Nos vemos el domingo que viene, o como ya sabéis, y si hay un ratito o algo que contar, tal vez entre semana, mientras tanto, os deseo una feliz semana a todos, algunos sé que tal vez llena de nervios, porque se casan en 6 días...
A Nagore y Curro les dedico este postre y aunque aun no dieron el "sí quiero", desearles toda la felicidad del mundo y decirles que el sábado me acordaré mucho de ellos... Os deseo lo mejor!!!
Feliz semana a todos!!!
- 3 yemas.
- 75 gr. de azúcar.
- 75 ml. de vino Marsala.
- 100 ml. de vino Marsala para remojar los bizcochos.
- 75 ml. de café.
- 250 gr. de queso mascarpone.
- 125 ml. de nata.
- 1 clara.
- 150 gr. de bizcochos.
- Cacao para adornar.
Elaboración:
En un bol al baño María, ponéis las yemas de huevo y el azúcar, batiendolo con unas barillas hasta que la crema quede de un tono más o menos marfil. Echáis el vino Marsala y a mezclar con suavidad hasta que la mezcla espese, y se deja enfriar.
El mascarpone lo mezcláis con el café.
Batís la nata hasta que esté bien montada.
Batís la clara hasta que esté a punto de nieve, y la mezcláis con mucho cuidado con la mezcla de las yemas y azúcar.
En un plato hondo, ponéis el resto del vino Marsala, y váis empapando los bizcochos, colocandolos en un molde. Ponéis encima la mezcla de mascarpone, después, la crema de yemas y azúcar y para terminar, la nata montada.
Y directo al frigorífico, para que coja cuerpo durante unas horas. A la hora de servirlo, espolvoreáis el cacao en polvo y ya tenéis un riquísimo tiramisú.
Notas:
Recomiendo que el queso esté a temperatura ambiente, el motivo?, muy simple, será mucho más fácil mezclarlo con el café, y quedará más cremoso.
Otro punto, el vino Marsala que se utiliza para la mezcla con las yemas y el azúcar se puede cambiar por brandy, y le dará un toque diferente.
Más cositas... sí, el bizcocho tenéis dos opciones, o hacerlo en casa, o comprarlo, eso depende de las ganas o el tiempo que tengáis para estar en la cocina, yo, en este caso los he comprado, tenía tiempo, vale, pero no había ganas, básicamente porque me apetecía dedicar ese tiempo a otras cosas...
Y si por cualquier cosa, no encontráis el vino Marsala, podéis cambiar todo por brandy, eso si, a la hora de remojar los bizcochos, no olvidéis mezclarlo con café, y por supuesto que esté frio, porque si no, los bizcochos se quedarán demasido blandos y será muy complicado manejarlos.
Apuntes:
Esta vez no comentaré ninguna bebida con la que acompañar este riquísimo tiramisú, por un par de razones, una, que hasta que no remate las dos ginebras ( es lo que apetece después de comer demasiado tiramisú ) que tengo en casa, no pienso comprar ninguna nueva, aunque sí os puedo recordar que la que nunca falta en mi armario de las bebidas es la riquísima Hendrick's, lo recuerdo porque en poco más de un mes es mi santo, sí, el día del Pilar, y si no sabéis que regalarme, os aseguro que con eso no váis a fallar..., la otra?, pues no me regañéis, pero es que la lasaña que voy a cenar hoy está casi en su punto, y aun tengo que poner la mesa...
Nos vemos el domingo que viene, o como ya sabéis, y si hay un ratito o algo que contar, tal vez entre semana, mientras tanto, os deseo una feliz semana a todos, algunos sé que tal vez llena de nervios, porque se casan en 6 días...
A Nagore y Curro les dedico este postre y aunque aun no dieron el "sí quiero", desearles toda la felicidad del mundo y decirles que el sábado me acordaré mucho de ellos... Os deseo lo mejor!!!
Feliz semana a todos!!!
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