lunes, 23 de marzo de 2015

Alas de pollo especiadas "a la japonesa"


Ingredientes:
- 1200-1500 gr. de alas de pollo.
Para la marinada:
- 1 ajo.
- 4 gr. de jengibre fresco rallado.
- 30 ml. de salsa de soja.
- 15 ml. de aceite de oliva virgen extra.
- 15 ml. de salsa de pescado.
- 2'5 ml. de mirin.
- 3 gr. de sal.
- 1 gr. de pimienta molida.
Para el glaseado:
- 250 ml. de mirin.
- 30 ml. de salsa de soja. 
- 15 ml. de salsa de pescado.
- 1 gr. de pimienta.
- 10 ml. de zumo de limón.
- 1 ajo.
- 8 gotas de tabasco.
- La piel rallada de 1/2 limón.
- Sésamo.
Elaboración:
   Lo primero que debes hacer es preparar la marinada. En un bol pon todos los ingredientes (el ajo lo mejor es que vaya bien machacado) y mueve hasta que veas que se han mezclado bien. Echa en esa marinada las alas de pollo, tapa con un papel film y pon en la nevera al menos ocho horas.
   Precalienta el horno a 180 ºC. Una vez pasadas esas horas macerando, pon las alas en la rejilla del horno y deja a media altura entre 20-30 minutos. Importante poner una bandeja debajo para que recoja los jugos que suelte el pollo y no te ponga la solera del horno muy sucio. Si quieres, puedes dar la vuelta a las alas a mitad de cocción.
   Mientras que se hacen, prepara el glaseado. Para ello, pon en un cazo todos los ingredientes (de nuevo, intenta que el ajo vaya bien machacado), menos el sésamo, que lo reservas para el final y pon en el fuego, primero a fuego fuerte, hasta que empiece a hervir y una vez que hierva, baja la intensidad del fuego para que se vaya caramelizando el líquido. Mueve de vez en cuando. El tiempo que tarda la salsa en estar es más o menos el tiempo que tardan en estar las alas de pollo.
   Una vez finalizado el tiempo, pasa las alas a un bol y echa la salsa por encima, moviendo para que todo se mezcle bien y añade el sésamo, moviendo de nuevo, para que todas las alas tengan algo.
   Sirve rápido, para que no se enfríen.

Notas:
   Aunque parezca a simple vista un plato complicado, no lo es, es más difícil encontrar algunos ingredientes que hacer el plato, que es casi todo mezclar y poco más. Vamos a las fotos con explicación, por si hay dudas.


   En la foto de la izquierda está el jengibre a punto de pasar por el rallador. Con un centímetro más o menos es suficiente. A la derecha arriba está ya rallado, así veis la cantidad total. Y el ajo, lo que hago es pasarlo por un prensa ajos en vez de machacarlo, ya que así queda mucho mejor.


      Ahí tenéis las salsas, para que sepáis las que son. El aceite lo tenéis en casa seguro. La salsa de soja se encuentra fácilmente en todos o casi todos los supermercados (ojo, cuidado con la salsa de soja, que las hay muy dulces y son capaces de estropear cualquier plato) y, tanto el mirin, como la salsa de pescado, los podéis encontrar en tiendas en los que vendan productos japoneses.


   En esta foto podéis ver las alas en la marinada y una vez colocadas en la parrilla. Tenéis dos opciones, una, poner las alas enteras y otra, que es como yo lo hago, partirlas en dos, de esa forma se pueden manejar mejor a la hora de mezclarlas tanto con la marinada con la glasa. También será más cómodo a la hora de comer. Pero podéis hacerlas de las dos formas.


   Esta foto es para que veais la razón de poner una bandeja debajo, ya que como se puede ver, cae el jugo que sueltan y si no lo hacéis así, pondréis el horno "hecho unos zorros"... Como he dicho en la elaboración de la receta, tenéis la opción de dar la vuelta a las alas a mitad de horneado para que se doren por todos lador por igual, aunque no es realmente necesario.


   Ya os he dicho en varias ocasiones que es bueno tener una báscula de precisión y un juego de cucharas y tazas medidoras, puesto que nos facilita mucho la vida a la hora de elaborar algunas recetas. Pero como sé que muchos no me hacéis caso, en la foto podéis ver la cantidad de ralladura y de zumo de limón. Sí, ese hielo es limón. Tengo por costumbre tener siempre ralladura y zumo de limón congelados, así voy más rápida cuando hago ciertas recetas.


   Aquí veis la salsa antes de poner en el fuego (izquierda) y una vez pasados los 20 minutos de tenerla al fuego. Como se puede ver, la salsa espesa y se queda como si fuera una melaza. No se os olvide mover de vez en cuando. La salsa estará cuando al moverla, la espuma que hace se mantenga un tiempo y tarde en bajar, pero cuidado, que si nos pasamos de cocción quedará muy espesa. El truco de la cuchara "velada" es una opción para saber el punto justo.


   Tal vez en esta foto se ve mejor el punto del glaseado. Ya sabéis, primero se añade la salsa y una vez que están bien impregnadas, se echa el sésamo, ya que de esa forma se quedará bien pegado.

Apuntes:
   Llevaba tiempo con ganas de poner esta receta en el blog, mucho tiempo y por fin los he conseguido después del parón que he tenido. Es una de esas recetas que amas o que odias, aunque por el momento aún no he encontrado a nadie que las odie cuando las he preparado.
   La receta me la encontré un día navegando por internet, de pura chiripa y me gustó tanto que la apunté en mi libreta para hacer. Buahhhhh... Cuando la hice la primera vez decidí que se quedaba a vivir conmigo!!!

   Como ya he comentado, las salsas necesarias no son muy difíciles de encontrar. En Sevilla hay un super con productos asiáticos y con seguridad que, tanto el mirin como la salsa de pescado, los podéis encontrar allí. La calle está a espaldas de la plaza del Duque, si no recuerdo mal, se llama calle Aponte, hay un restaurante chino y justo al lado, el super del que hablo. En Madrid debe haber mil sitios en los que comprarlos, por ejemplo en "Tokio-ya", que está en la avenida Presidente Carmona. Creo que también tenían tienda en Barcelona, de todas formas tienen web. Y hablando de web, como la gran mayoría de cosas, también se puede comprar por internet. Mumumio las tiene con seguridad (acabo de verlo en su web). Ya no tenéis excusa a la hora de preparar este plato.
   Para que no haya sorpresas, os comento que es una receta con un toque dulzón, pero no dulce, que aunque parezca lo mismo, no lo es, os lo aseguro.

   Y como casi siempre, retomando de nuevo las buenas costumbres, otro lunes más por el blog, que es el mejor día para publicar, así disponéis de toda la semana para ir buscando los ingredientes y de ese modo, preparar la receta en fin de semana, que es cuando la mayoría de la gente tiene tiempo libre. Habéis hecho algo especial este finde? Yo, esperar... Y con la coña al final no he quedado con Víctor, que venía de Castellón a casa de unos primos a pasar el puente (afortunado él, que lo ha tenido). Pero no hay problema, puesto que entre Maypi y yo estamos intentando convencerle para que desayune con nosotras el día 11 antes del bautizo que tiene. Creo que con paciencia y haciendo un poco de presión, lo conseguiremos, ya os lo contaré!!

   Y poco más por hoy, ahora voy a ver si amaso algo y a probar una receta de kepchup en mi olla enana de cocción lenta, que siempre la hago al mínimo en el fuego y no sé como quedará en este nuevo trasto. Si funciona os lo cuento. Parece que se llevan ahora esas ollas por estas tierras, aunque en Estados Unidos las tiene casi todo el mundo en casa. Yo soy muy de cocinar a fuego lento, pero antes de gastarme un pastizal en una olla que no sé si voy a usar, he preferido probar con esta que tengo, que ha costado la friolera de 10 euros!! Juuaaasss... Engañé a padre para que la comprase en una tienda de Sevilla y ya está estrenada, con resultados fantásticos.

   Nos vemos en unos días... Feliz semana a todos!!!

jueves, 19 de marzo de 2015

Sazonador tex-mex


Ingredientes:
- 4.9 gr. de comino.
- 1.8 gr. de chile en polvo.
- 1.5 gr. de pimentón.
- 0.7 gr. de cebolla en polvo.
- 1.8 gr. de pimienta molida.
- 0.5 gr. de cayena molida.
- 1    gr. de ajo en polvo.
- 6    gr. de sal.
Elaboración:
   Mezcla todos los ingredientes y guarda en un bote, preferiblemente de cristal, para usarlo en diferentes recetas.

Notas:
   Es muy sencillo, pero sí me gustaría hacer un par de aclaraciones. Habitualmente siempre pongo la coletilla "de La Vera" cada vez que uso la palabra "pimentón", pero esta vez no, hay que usar del que no es ahumado, para que no enmascare el sabor y el aroma del resto de los ingredientes.
   También decir que si tostáis tanto el chile, como el comino, tendréis un subidón de aromas. Cuidado si lo hacéis, no los vayáis a quemar.
   Lo sé, son cantidades muy pequeñas y alguno seguro que sigue sin báscula de precisión en casa... Vamos a intentar solucionarlo hablando de "cucharadas y cucharaditas" (ojo, hablo de las de medir en plan receta americana, es decir, las que se calculan en ml., en la que la cucharada tiene 15 ml. y la cucharadita tiene 5 ml.). Si aún no las tenéis, os recomiendo un juego, las hay muy baratas y en serio que merecen la pena. La receta en cucharadas sería:
- 2 cucharaditas de comino; - 1 cucharada de chile; - 1/2 cucharadita de pimentón; - 1/4 de cucharadita de cebolla en polvo; - 1 cucharadita de pimienta molida; - 1/4 de cucharadita de cayena molida; - 1/4 de cucharadita de ajo en polvo; - 1 cucharadita de sal.
En la receta del sazonador cajún (pinchando aquí veréis la receta), tengo puesta la foto de lo que sería una cucharadita o "teaspoon".

Apuntes:
   Vuelvo al blog, sí, que lo tenía abandonadísimo!! Lo haré con tranquilidad, poniendo cosillas de vez en cuando, hasta que vuelva a coger el ritmo y a volver a publicar los días que tocaban, que eran los domingos o lunes. La verdad es que lo echo de menos, hay gente que me da la paliza diciendo que si creían recordar que yo tenía un blog, como es el caso de Maypi, o Sergio, que me regaña por no actualizar la página de Facebook, o Ander, que ayer me mandó un precioso mensaje que decía algo así como "triste dejar morir así un blog"... Mira, que me vino una mezcla entre risa y pena, risa por, como hubiera dicho mi abuela, el acuerdo, pena por ser una realidad, pero ya estoy aquí!!!

   Volviendo al tema de las cucharas de medición, tengo varios modelos, hace ya tiempo que las colecciono, al igual que las "cups", lo dejo caer, por si lo habéis olvidado...


   De todas, a las que más cariño tengo es a las metálicas de la derecha, me las trajo mi "Lamparito" de Estados Unidos, al igual que un juego de tazas medidoras que molan mogollón!! Las más castigadas son las de plástico, esas son de la tienda Casa, creo que costaron la friolera de 2 euros, por lo que ya podéis estar "ajilando" a por unas!!!

   Por cierto, a modo de información, para los que seguís a Carlota, decir que ya anda, parece un perdigoncino, a ver si en cuanto la vea le hago un vídeo y os la enseño, está para comérsela!!!

   Y ahora me despido, pero tranquilos, que no tardaré tanto en volver, seguro que la semana que viene estoy de nuevo de vuelta con otra receta simple para retomar el contacto!!

   Madre del amor hermoso, que me voy y no os digo ni para qué sirve el sazonador de hoy!!!! Veis como aún no estoy en plena forma?? Por ejemplo lo podéis usar si os preparáis unas fajitas, burritos, para añadir a una carne... Ya os iré poniendo aquí recetas en lo que darle uso.

   Ahora sí, nos vemos en unos días... Feliz semana!!!