Ingredientes:
- 4 claras de huevo.
- 8 yemas de huevo.
- 100 gr. de azúcar.
- 200 gr. de mantequilla.
- 200 gr. de chocolate.
- 80 gr. de harina.
- Mantequilla y harina o cacao en polvo para preparar los moldes.
Elaboración:
Troceamos el chocolate y lo ponemos en un bol al baño María junto con la mantequilla "en pomada" ( temperatura ambiente ), y dejamos que se funda a fuego bajo. Apartamos y dejamos templar.
Mientras que el chocolate se funde con la mantequilla, cogeremos los moldes y los engrasaremos con mantequilla, espolvoreandolos después con harina o cacao en polvo.
En un bol batimos las claras a punto de nieve y reservamos. En otro, ponemos las yemas con el azúcar y batimos hasta que la mezcla esté blanquecina. Tamizamos la harina y mezclamos bien el conjunto. Echamos el chocolate con la mantequilla, incorporandolo con cuidado, y por último, las caras que habíamos montado anteriormente.
Llenamos los moldes hasta sus 3/4 partes y metemos en el horno, que habremos precalentado a 200º, unos 9-10 minutos. Desmoldamos.
Notas:
El chocolate que yo he utilizado para hacer esta receta es Nestlé postres, pero imagino que cualquiera puede valer.
Para echar la mezcla en los moldes tenéis dos opciones, o con una cuchara, como se ha hecho toda la vida, o echar toda la masa en una manga pastelera y desde ahí a los moldes, cosa que recomiendo, es mucho más rápido, y si utilizáis para esto una manga pastelera desechable, como yo he hecho, mejor que mejor.
Una cosa buena de este postre... Que se puede congelar!!!, lo único que varían son los tiempos en el horno. Mi recomendación, el día que se hace por primera vez, hay controlar el tiempo de cocción, como yo he hecho, porque cada horno es un mundo. Para que os hagáis una idea, en el mío, una vez que está congelado, a 200º y con la función de aire puesta, tarda 13 minutos en hacerse.
Se me olvidaba!!!, con esa cantidad salen unas ocho unidades.
Qué podemos hacer con las claras que sobran?, pues merengue, por ejemplo, vamos a ver, mezclamos 100 gr. de azúcar refinado y 100 gr. de azúcar glass, dividimos la mezcla y a una de ella le añadimos 30 gr. de cacao tamizado. Montamos las 4 claras a punto de nieve con la mitad del azúcar, y después añadimos el azúcar con cacao, poco a poco y con cuidado.
Cuando la mezcla esté firme y brillante, la ponemos en una manga pastelera con boquilla dentada y lo vamos poniendo en la placa del horno, en la que habremos puesto papel vegetal y lo habremos untado con mantequilla y habremos espolvoreado con harina, haciendo pequeños merengues. Lo dejamos reposar unos 10 minutos. Metemos la placa en el horno a 100º durante 1 hora y media. Sacamos los merengues y los dejamos enfríar.
Si no os apetece hacer todo eso, siempre queda la opción de hacer una simple tortilla de claras.
Apuntes:
¿Qué decir de este maravilloso postre?, pues para empezar, que es de los más sencillos que he elaborado, y eso que es la primera vez que lo hago, aunque viendo el resultado, creo que se convertirá en uno de mis postres básicos.
Os aseguro que si a mí me ha salido sin problemas y como he dicho, a la primera, y teniendo en cuenta que lo hice con unos cuantos de contratiempos totalmente ajenos al postre, os va a salir a todos.
Posiblemente os habréis encontrado este postre en las cartas de los restaurantes con distintos nombres, volcán de chocolate, sufflé de chocolate, muerte por chocolate,..., porque el cocinero que lo inventó, Michel Bras, patentó el nombre del postre en cuestión, pero no deja de ser un bizcocho de chocolate cuajado por fuera y con el centro más o menos cremoso o líquido, no os dejéis intimidar.
¿Queréis que os diga un secreto?, el jueves, cuando lo hice, ¡¡me comí 3!!, ahora entiendo el nombre de "muerte por chocolate", de hecho, el último que comí fue sobre las 12 de la noche y ese, tuve que empujarlo para que pasase con un gin-tonic, porque no fue por hambre, fue auténtica gula.
Y desde aquí, me gustaría agradecer a Víctor Bonilla, cocinero del hotel Torrequebrada, por compartir conmigo la receta de este fantástico postre. Lo sé querido Víctor, en contra de mis principios de hacer la receta tal cual la primera vez, sé que he hecho una pequeña variación, pero es que lo llevo en los genes, mi padre tiene la culpa de todo, espero que sepas disculparme, pero a pesar de todo, ha salido fantástica.
Ni qué decir tiene que hasta dentro de 4 semanas no toca postre, aunque esta vez ya se lo que haré,..., no, no, por supuesto que no lo diré, aun os quedan tres recetillas de "salado", que espero que también hagáis.
Nos vemos en unos días... ¡¡Feliz semana a todos!!